Investigan vínculo de la mafia china en la masacre de orientales en CDE

“Carta blanca para operar en Ciudad del Este” habría sido la orden del exintendente Miguel Prieto al emisario de los “chinos rojos”, cuya comunidad fue golpeada de manera terrible con la masacre del sábado en el edificio Castillo de Diamante. Las fuentes señalan incluso que el destituido jefe comunal recibía “una cuota” de parte de los mismos, y no eran solamente “5 cajas de vino al mes”, como dijo un entrevistado de la cadena catarí Al Jazeera en un material investigativo sobre los “rojos” en Paraguay.

Miguel Prieto participó como invitado, en su carácter de intendente, de varios acontecimientos organizados por los orientales ilegales y estuvo en el gigante asiático buscando respaldo financiero para su campaña hacia la presidencia. Llegó a prometerles cortar la relación con Taiwán y convertir a Paraguay en un aliado de los comunistas.

A principios de este año, cuando todavía era intendente, envió a su prima Meribed Vallejos, entonces directora de Impuestos Inmobiliarios, hasta China para traer “donaciones” para familias necesitadas. Nunca especificaron en qué consistieron las donaciones, ni se supo a quiénes favorecieron.

El fiscal Alcides Giménez, quien investiga el múltiple asesinato, dejó en manos de la Interpol el requerimiento de datos sobre los cinco fallecidos y sus posibles vínculos con la mafia. De acuerdo con datos arrimados a nuestro medio, los “chinos rojos” ingresan legalmente a Brasil, pero luego llegan a Ciudad del Este en forma irregular, mediante coimas en Migraciones y en la Policía. Las fuentes señalan que la “mafia china” se está reagrupando en el Este con esquemas diversificados para delinquir y métodos sangrientos para cobrar su “peaje”.