Insultos, intimaciones y amenazas al interventor en la Junta Municipal

Ramón Ramírez se prestó innecesariamente al juego de los concejales serviles de Miguel Prieto, que lo interpelaron en una tensa sesión.

Oscar González, alias “Café”, lo amenazó directamente con una “guerra” si no se alinea a las intenciones del suspendido intendente. “Usted ya no va a tener paz”, le advirtió el obtuso edil oficialista. Por su parte, Pedro Acuña intentó marcarle la agenda y en tono soberbio lo instó a visitar las comisiones barriales para “probar” que se les transfirió dinero municipal. A su vez, Alison Anissimoff y Valeria Romero le culparon del roce que tuvieron con agitadores sociales en el Municipio.

Al final, Ramírez admitió que “no era su obligación ir a la Junta” y remató señalando que la reunión “no sirvió para nada”.